En el fútbol sudamericano no basta con talento: hay que saber resistir, sufrir y golpear en el momento justo. Mushuc Runa lo entendió todo. Y en Argentina, lo ejecutó con maestría.
El ‘Ponchito’ volvió a dar un golpe sobre la mesa en la CONMEBOL Sudamericana 2025. Esta vez lo hizo venciendo por 1-0 a Unión de Santa Fe en territorio argentino, un resultado que no solo lo mantiene invicto, sino que lo deja a un paso de clasificar directamente a los octavos de final. ¿Casualidad? Nada de eso. Lo de Mushuc Runa es carácter, solidez táctica y una idea clara que se fortalece con cada partido.
Una propuesta pragmática que da resultados
El equipo ambateño, comandado por el experimentado Ever Hugo Almeida, presentó una propuesta pragmática pero perfectamente ejecutada. Sabía que Unión saldría a matar o morir, y que el contexto en el Estadio 15 de Abril sería hostil. Pero lejos de achicarse, Mushuc Runa mostró temple y oficio.
Los primeros 40 minutos fueron de aguante. Unión presionó alto, buscó por las bandas y trató de romper el bloque defensivo visitante con centros y remates lejanos. Sin embargo, una vez más apareció la figura de Rodrigo Formento. El arquero uruguayo volvió a ser clave con atajadas salvadoras que mantuvieron con vida al equipo cuando más lo necesitaba.
La eficacia como arma letal
Y cuando el primer tiempo moría, llegó el golpe de calidad. Una recuperación en media cancha, un pase quirúrgico de Joao Orejuela y una definición elegante de Elián Caicedo pusieron el 0-1 justo antes del descanso. Fue un mazazo emocional para el equipo argentino y un impulso anímico brutal para los del ‘Ponchito’.
Un segundo tiempo de resistencia con inteligencia
En el complemento, Mushuc Runa intentó brevemente ampliar la ventaja, pero pronto entendió que lo más importante era cuidar el resultado. Unión, ya sin la frescura del primer tiempo, se volvió más predecible. Los centros al área y los tiros desde fuera del área fueron bien resueltos por una defensa que nunca perdió la concentración.
Almeida volvió a demostrar por qué es uno de los técnicos más respetados del continente. Con los ingresos de Santiago Sinisterra, Jorge Gracia y Pedro Peralta, refrescó el mediocampo y mantuvo la intensidad defensiva. No fue un equipo que resistió por azar: supo leer el partido, lo gestionó con inteligencia y selló un triunfo enorme.
Una campaña que ya es histórica
Con este resultado, Mushuc Runa alcanza los 13 puntos en el Grupo E, manteniéndose invicto y con un pie en los octavos de final. Ya había dado la sorpresa al vencer a Cruzeiro en Brasil, y ahora suma otra página dorada al ganar en Argentina.
¿Quién pensaba que el equipo indígena de Ecuador lideraría su grupo ante rivales de peso continental? La Sudamericana suele premiar a los equipos que entienden el torneo. Y Mushuc Runa lo ha entendido mejor que nadie.
Identidad, solidez y ambición
Más allá de los puntos, lo que está construyendo este equipo es una identidad. No es el más vistoso, no juega para la galería, pero es efectivo, ordenado y tiene una convicción que contagia. Se defiende en bloque, ataca cuando debe y no se desespera si el balón no es suyo. Ha encontrado un equilibrio que lo hace temible.
Y lo cierto es que Mushuc Runa no sorprende: convence. Porque todo lo que hace tiene sentido. Desde su planteo táctico hasta la forma en la que administra los tiempos del partido.
Palestino, el último obstáculo
El próximo 28 de mayo, Mushuc Runa cerrará su fase de grupos visitando a Palestino en Chile. Un empate le bastaría para sellar el primer lugar del grupo y clasificar directamente a los octavos. Con la confianza por las nubes y un equipo que ha mostrado madurez en cada salida, todo indica que el ‘Ponchito’ puede seguir escribiendo historia.
En un torneo lleno de gigantes, el humilde club de Ambato se ha ganado un lugar con trabajo, humildad y fútbol.
Escrito por Jefferson Yazuma